Una lección de vida.

Hay muchas lecciones en la vida, y luego hay, lecciones de vida. 

Puede que parezcan lo mismo, pero no lo son. La lección de August, fue el libro que escogimos el pasado año para realizar una actividad que nos encanta en el CEIP Mestre Martínez Alonso, nuestro Club de lectura. Lo seleccionamos con cierto reparo, pues lo leyeron alumnos y alumnas de 5º de Educación Primaria. A pesar de que parecía una lectura que se les podría venir un poco grande, nos sorprendieron con su entusiasmo y motivación para con la historia. Una historia que ha aportado una maravillosa lección. 

Todos los años, decidimos para nuestro Club de lectura, obras que puedan ofrecer un valor añadido a las letras, pero jamás imaginamos que esta lectura nos transformaría de algún modo. Cuando en las sesiones de la hora de leer que compartimos en el Club, comentábamos los capítulos que avanzaban con los días, diferentes reacciones (desde las risas a los llantos contenidos de emoción) se fueron gestando y nos fueron aunando como grupo. Pero fue la reflexión que hicimos a nivel grupal y con relación a la experiencia que podíamos llevar a cabo en nuestro día a día en el centro, que nos dio la lección. Esa lección de vida, difícil de olvidar.

Por este motivo, cuando supimos este año del proyecto #Soyxqsomos, ¡no nos podíamos creer que no hubiésemos coincidido en el tiempo! Nosotros no estamos leyendo ahora mismo Wonder, pero, y sin hacer ningún spoiler, queremos compartir con todo el mundo lo que aprendimos con su lectura.

El comienzo de nuestra experiencia, y para acercarnos al libro, fue la elaboración de unos marcapáginas con una frase que escogimos por su impacto, y que empleamos de santo y seña para todos los miembros del Club lector:

“Todo el mundo debería recibir una ovación del público puesto en pie al menos una vez en su vida, porque todos vencemos al mundo.”

Cada vez que alguno de nosotros entraba al Club, para animar y dinamizarlo, lo gritaba bien alto. Pronto se convirtió en una de nuestras frases favoritas de la obra, un lema que nos une para siempre por su significado y por su recuerdo.

El último día de Club lector, fue muy emotivo. Cada uno de nosotros expresó verbalmente qué había aprendido con la lectura de Wonder. Sus aprendizajes fueron realmente adultos y mereció la pena cada una de sus letras. Noté que les costaba entregar el libro a la biblioteca. Fue una actividad muy gratificante y educativa y a título personal me gustaría decir que muchos estándares de aprendizaje nos brindan aprendizajes vacíos y poco realistas, sin embargo la lectura de este libro es uno de esos aprendizajes de vida que nunca se olvidan.

Pero, y en palabras de los niños que son los verdaderos protagonistas de esta actividad, esto es lo que esta lectura supuso para nosotros:

Con este anónimo, que aprende a acompañar a los que se sienten aislados, me quedo. Con esa capacidad para abrazar la empatía. ¿Qué mejor aprendizaje se puede esperar? ¿Qué mejor lección de vida? Y es que #Soyxqsomos es esto, en conclusión, aprender por nosotros mismos lo que August vive de un modo ficticio en este maravilloso libro.

...porque todos vencemos al mundo...